Muchos padres evitan que sus hijos más pequeños se armen de pinceles, pintura y papel para crear a sus anchas. Pero si les vestimos con ropa que no usemos y extendemos un gran mantel plástico en el suelo podremos improvisar para ellos un verdadero estudio de artista. En esta ocasión mis sobrinos conocieron las creaciones de Mark Rothko intentando reproducirlas. Les encantó experimentar con el color aplicándolo en grandes manchas con el pincel y para mí fue un verdadero placer verles expresarse con absoluta libertad.
Many parents try to avoid having their youngsters arm themselves with brushes, paint and paper to create as they please.
But if we dress them with old clothes and put a vynil table cloth on the floor, we could create for them a true artist studio. This time, my nieces and nephews got to know the works of Mark Rothko and tried to replicate them. They loved experimenting with color, using it in big patches as they moved their brushes.
To me, it was a real pleasure seeing them express themselves in true freedom.
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