Si tuviese que hacer una lista con las películas más terroríficas, El Resplandor, La Semilla del diablo y El exorcista ocuparían los tres primeros puestos. En el caso de las dos primeras sus directores, Stanley Kubrick y Roman Polanski, figuran entre mis más admirados artistas. Los actores de las tres cintas destacan por sus brillantes interpretaciones (Jack Nicholson y Mia Farrow bordan uno de sus mejores papeles) y en todas se percibe la importancia de unir una buena banda sonora y una cuidada ambientación a un sólido guión para hacernos temblar como niños en un cuarto oscuro. Yo no me atrevería a verlas a solas. Feliz noche de los difuntos...
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